Nota de prensa ‘Metales de los 70’

Actividades, Actualidad

El Museo LM Arte Colección, situado en La Laguna, inaugura una nueva exposición temporal, que en esta ocasión repasa el uso de los metales en el arte de los años 70 del siglo XX, especialmente en Canarias. Tras un largo periodo marcado por las crisis bélicas y económicas tanto nacionales como internacionales, y no menos por los nuevos horizontes e incertidumbres que abría la carrera espacial y la llegada a la Luna, durante esa década se activa un proceso de profundos cambios y renovaciones desde el punto de vista sociocultural en España, que incluyó la revisión y rescate de un pasado difuso y la ampliación del eco de una sociedad que reclamaba mayor presencia y libertad, y en consecuencia la necesidad de reactivación de una vida cultural hasta entonces inercial por obligación.

Fruto de estos impulsos, en Canarias aparecen durante los primeros setenta nuevas galerías y salas de arte (aunque solo unas pocas conseguirán consolidarse luego en el tiempo), así como proyectos expositivos que destacan por su carácter renovador, caso de la I Exposición Internacional de Escultura en la Calle­, organizada desde el Colegio Oficial de Arquitectos de Canarias, y que permitió atraer a la isla a un muy destacado conjunto de artistas e intelectuales reconocidos a nivel mundial. También renovadoras fueron las propuestas de la Sala Conca, que había abierto su sede en La Laguna en 1971, y en cuya actividad se sucedería la presencia de nombres destacados de la vanguardia artística nacional, con los proyectos de promoción de artistas canarios de diferentes generaciones.

En este contexto, la presencia de la obra en metal –bronces y latones dorados, reciclaje de hierros, láminas de estaño y aluminio pulido, o cobres cincelados– adquiere un protagonismo significativo en el trabajo de diferentes artistas de las islas, unos renovando el diálogo con la tradición escultórica de la forja, el repujado o la fundición, pero también, en otros casos, dislocando la bidimensionalidad y los materiales usados habitualmente en la obra de pared, al incorporar collages de chapas metálicas y otros elementos o mecanismos, que se movían ahora a medio camino entre el cuadro y la escultura.

Conformado por piezas de artistas insulares pero también de destacados autores del ámbito nacional e internacional, y relacionados, en casi todos los casos, con aquellos proyectos expositivos de la Escultura en la Calle o de la Sala Conca, este conjunto de chatarras retorcidas y espejos de metal, que reflejan cuerpos y espacios, corazas y vacíos, resultan retrato y disección de una época incierta y una humanidad en descubrimiento continuo de sus límites, pero también en pelea perpetua consigo misma.